Monday, July 10, 2006

Hipotecas variables

Las familias siguen rechazando el tipo de
interés fijo, pese a las subidas que se avecinan

20 minutos / 4.07.2006
Las subidas de tipos de interés no parecen asustar a las familias españolas a la hora de hipotecarse. Ni las que ya ha habido, tanto en el tipo oficial del Banco Central Europeo (BCE) como en el Euríbor, el principal índice al que están referenciados los créditos hipotecarios en España; ni los que vendrán con toda seguridad en los próximos meses.

La Reserva Federal de los EE UU marcó el camino la semana pasada, con un aumento de 0,25 puntos para combatir la inflación, que colocó el precio del dinero allí en el 5,75%. El jueves conoceremos los planes del BCE. Aunque los analistas no prevén otra subida inmediata, el banco europeo mantendrá una política monetaria más agresiva (o sea, con más subidas) para combatir el aumento de los precios en los países de la zona euro. Pese a ello, nuestras familias se siguen hipotecando muy mayoritariamente (el 96%) a tipo variable, e incluso las hay que prefieren pasarse del tipo fijo –que sólo tienen ya el 3% de los préstamos hipotecarios– al variable.

Según las estadísticas conocidas ayer, la hipoteca media para adquirir una vivienda en España es de 138.958 euros y se contrata a 25 años. O sea, un 15% más cara que un año atrás. Lógico si tenemos en cuenta que ése ha sido el incremento del precio de la vivienda en los últimos doce meses.

Los mismos datos señalan que el interés medio de esa hipoteca es ya del 3,57%, cuando el índice oficial de la zona euro está en el 2,75% y el Euribor por encima del 3,40%. Es decir, que seguirán subiendo hasta acercarse a los tipos reales del mercado hipotecario: aquí pagamos entre el 3,40 y el 3,73%. Por todo ello, lo que ahora puede parecer una ventaja, a medio plazo puede ser un mal negocio.

La opa de nunca acabar

Arcelor acepta la oferta de Mittal mientras
Gas Natural sigue esperando qué pasa con Endesa.

20 minutos / 27.06.2006
Tras ver cómo ha culminado con éxito la opa que ha supuesto el nacimiento del primer grupo siderúrgico del mundo –al comprar Mittal el gigante europeo Arcelor– uno se pregunta qué fue de una de las opas que más ríos de tinta ha generado en la historia de la economía española: la que lanzó Gas Natural sobre Endesa hace ya casi diez meses, a la que siguió la de la alemana E.ON.El hecho es que lo que empezó como una pura operación empresarial y se transformó en un pimpampun político ha acabado por convertirse en un pleito judicial de difícil solución.

Se ha criticado que la empresa gasista lanzara la oferta por Endesa de forma hostil, aunque desde la compañía revelan que se hizo así porque no hubo más remedio y porque el presidente de la eléctrica, Manuel Pizarro, próximo al PP, se negó en redondo a aceptarla cuando se le planteó con carácter amistoso. Y la pequeñez empresarial de Gas Natural frente a un gigante como Endesa tampoco ayudó a hacerla viable. Lo único cierto es que, lejos de detenerse en estos detalles, los populares vieron en la catalanidad de la opadora un peligro que desapareció cuando la alemana E.ON decidió, ahora sí con el beneplácito de Pizarro, plantear su propia oferta en unos términos aparentemente mucho más ventajosos. Al mismo tiempo, el Gobierno intentaba cumplir escrupulosamente los trámites necesarios para autorizar una operación que teóricamente reforzaba nuestro sector energético.

Mientras, los accionistas de Endesa aún no se han podido pronunciar sobre cuál de las dos ofertas les interesa más. Y todo apunta a que aún tardarán en hacerlo porque el asunto está ahora en manos del Tribunal Supremo, y ya conocemos la escasa celeridad de nuestro sistema judicial.

Hay que exportar más

Los últimos datos estadísticos sitúan
a nuestro comercio exterior a la cola de Europa

20 minutos / 20.06.2006
Por si había alguna duda sobre la marcha negativa del sector exterior de la economía española, unos nuevos datos de la Oficina Europea de Estadística conocidos ayer certificaron que está a la cola de Europa, sólo superado por el Reino Unido.

Nuestro déficit comercial –la diferencia entre lo que exportamos fuera y lo que importamos de otros países– ha pasado de 16.200 millones de euros registrados entre enero y abril de 2005, a los 21.100 millones acumulados en los cuatro primeros meses de 2006, y nos acercamos peligrosamente a los 23.800 millones negativos que presenta la balanza exterior británica.

En el extremo opuesto sigue Alemania, el primer exportador mundial, con una diferencia a favor de sus ventas al exterior (superávit) de 38.900 millones de euros, tras experimentar un ligero descenso desde los 42.600 millones del año pasado. Le siguen de lejos Holanda (9.600 millones de euros), Irlanda (7.500 millones) y Suecia (5.000 millones).

Las autoridades económicas seguirán culpando de estos datos a la buena marcha de la economía española, que sigue creciendo por encima de la media europea; a la falta de competitividad, otra de nuestras asignaturas pendientes; y a los sueldos elevados –como ha hecho recientemente el FMI– de los malos resultados de nuestro comercio exterior. Pero que se sepa, Alemania, Holanda o Suecia no van tan mal y allí los sueldos son mucho más altos que aquí. Quizá ha llegado el momento de hacer una clara apuesta por convertir el ‘made in Spain’ en algo más que una marca devaluada y darle a nuestros productos la proyección internacional que necesitan.

Nos conviene que gane Alemania

Sería la mejor noticia para la marcha de nuestra economía

20 minutos / 13.06.2006
Andamos estos días a golpe de pito. Del pito de los árbitros que dirigen los partidos del Mundial de Alemania. El fútbol lo llena todo y las cuestiones económicas no son ajenas a él. Hay sesudos estudios que concluyen que este mes de pelotas le irá de ídem a la maltrecha economía alemana.

Primero, gracias a los 3.000 millones de euros que los alemanes se gastarán en televisores, cervezas, refrescos, prendas deportivas, y demás. Luego, por la llegada de diez millones de turistas, el doble de lo que es habitual en estas fechas, que se dejarán otros 3.000 millones de euros en el país. Y después, porque la tercera economía del mundo aspira a venderse, ante los cientos de millones de ojos que siguen los partidos, como destino ideal para las inversiones extranjeras. En total, unos ingresos extra de 10.000 millones de euros que supondrían un aumento del 0,5% de la riqueza del país.

¿Y cuáles serán los efectos a largo plazo de todo este caudal de dinero? De momento, ya se han creado unos 60.000 empleos, la mitad de los cuales se mantendrán cuando el campeón levante la copa el próximo 9 de julio. Además, la confianza de las familias está en el nivel más alto de los últimos cuatro años, y se han revisado al alza las perspectivas de crecimiento económico, que estaban por los suelos.

Más allá de las posibilidades de nuestra selección, y de si caeremos en cuartos o no, a la economía española le interesa que el equipo de Ballack llegue lo más lejos posible. Y si puede ser, que gane el mundial. No olvidemos que Alemania es el segundo país que más productos compra a las empresas españolas –por valor de unos 20.000 millones de euros al año–, por detrás de Francia. Y que unos alemanes contentos y satisfechos son la mejor noticia para la buena marcha de nuestra economía.

Ni competitivos, ni productivos

Las empresas se van y los ERE’s
crecen a un ritmo preocupante

20 minutos / 30.05.06
No serán el tema estrella del debate sobre el Estado de la Nación que hoy y mañana se celebra en el Congreso de los Diputados. No es de esperar que Zapatero, Rajoy o el resto de oradores les dediquen más que alguna somera mención. Pero no por eso dejan de ser un problema, y grave, de nuestra economía. Me refiero a la creciente falta de competitividad de nuestras empresas y a la escasa productividad de nuestros trabajadores, dos campos en los que cada día estamos más lejos de los países de nuestro entorno.


El reciente caso de Braun, que ha decidido cerrar su planta en Cataluña dejando sin trabajo a cerca de 700 empleados para irse a algún país asiático o de la Europa del Este, es sólo el último capítulo de una larga historia que tiene demasiados antecedentes (Gillette, Phillips, Samsung, Lear, Volkswagen, etc…). Intentar atraer y retener a las empresas a base de subvenciones públicas, que son pan para hoy y hambre para mañana; o cruzarse de brazos echándole la culpa a las inevitables deslocalizaciones propiciadas por la maldita globalización no pueden ser las únicas respuestas de las administraciones ante tales situaciones. Como en la buena medicina, lo que conviene son medidas preventivas que eviten la enfermedad o, como mínimo, la hagan más llevadera en el caso de que nos pille un virus. Y no hay mejor vacuna que tener empresas muy competitivas y muy productividad.

Los últimos datos son poco esperan zadores: Ayer supimos que aunque los 11.768 trabajadores afectados por expedientes de regulación de empleo (ERE’s) en el primer trimestre del año suponen un 36,65% menos que en el mismo periodo de 2005, el número total de ERE’s ha crecido un 5,7% y el de expedientes de despidos colectivos, un 31,7%. Quizá hoy no habrá tiempo, pero habría que buscarlo ¿no?

Batacazo en las Bolsas

Los mercados bursátiles de todo el mundo caen
en cadena llevando la inquietud a los inversores

20 minutos / 23.05.2006
Malos tiempos para la Bolsa.La semana ha empezado tan mal como acabó. El índice que agrupa los 35 valores principales de la Bolsa española, el Ibex-35, cayó ayer casi un 3%, y el resto de los mercados europeos, norteamericanos y asiáticos no corrieron mejor suerte.Un batacazo que contrasta con los resultados bursátiles registrados durante el primer trimestre de 2006, cuando España se anotó el mejor arranquede ejercicio enocho años. Hace pocos días, todos apostaban porque el Ibex llegaría a los 12.000 puntos, pero ayer cayó por debajo de los 11.000.

El miedo a una subida de los tipos de interés para frenar la inflación en Europa, los EE UU e incluso China es el principal culpable, según los expertos,de estos movimientos que se producen simultáneamente en las Bolsas de todo el mundo. Lo cierto es que ésa puede ser una explicación, pero no parece que ese temor esté más justificado ahora que hace dos semanas,
cuando los índices de medio mundo batían récords y ofrecían rentabilidades acumuladas sin precedentes. Por la misma razón resulta complicado saber si esta caída tendrá continuidad o si, por contra, ya ha tocado suelo.

¿A quién preocupan estas bajadas? Tendemosa pensar que la Bolsa es cosa de cuatro ricachones que tienen metidos ahí sus cuantiosos ahorros, nada más lejos de la realidad. Además de ellos,o quizá bastante más que ellos, se verán afectados los ocho millones largos de españoles que tienen 244.000 millones de euros en fondos de inversión, especialmente los que sean de renta variable, y las miles de familias –el 24% del ahorro familiar en España está en la Bolsa– que siguen con preocupación la evolución de susTelefónicas, Endesas,Repsoles y otros valores del mercado bursátil.

Tuesday, May 16, 2006

Que cada palo aguante su vela

20 minutos / 16.05.2006
Una advertencia: Por un día, y sin que sirva de precedente, dejaré a un lado los acostumbrados análisis que intentan adornar semanalmente este espacio para manifestar mi más profundo desacuerdo con algunas de las cosas que están pasando a raíz de la supuesta estafa de Afinsa y Fórum Filatélico a más de 350.000 españoles.La primera es que no creo que el Gobierno deba pagar nada a las víctimas del timo filatélico, de la misma forma que no apoyó económicamente a los que sufrieron otros desmanes financieros parecidos, ya fueran por lo criminal (Gescartera, Banfisa, AVA, Eurobank,...) o por lo civil (¿qué dirían los accionistas de Terra que tuvieron que vender sus acciones muy por debajo del precio que las compraron?). Si hubiera que atender igual a todos, el déficit público se nos dispararía.

Los afectados tienen toda nuestra solidaridad, por supuesto, pero deben ser los jueces los que determinen, si hay delito, cómo se indemniza a los afectados. Y las empresas en cuestión parecen tener suficiente patrimonio para hacer frente a buena parte de esas responsabilidades penales que se pudieran determinar. Los inversores debían saber el riesgo que corrían al dejarles su dinero. Y el Gobierno tendría que extremar la vigilancia sobre este tipo de negocios más bien opacos. No en vano se empiezan a detectar vínculos con personas relacionadas en operaciones policiales contra la mafia de la Costa del Sol. Una vez más cabría preguntarse: ¿quién protege nuestro dinero?, ¿por qué se permite este tipo de actividades sin ningún control? Por si acaso, y como pasa con la caridad, la precaución bien entendida empieza por uno mismo. O sea, si le ofrecen duros a cuatro pesetas, desconfíe.

Nuestros males económicos

20 minutos / 09.05.2006

La Comisión Europea ha dado un nuevo tirón de orejas a nuestras autoridades económicas en sus previsiones de primavera.Como a los malos alumnos, Bruselas les recordó ayer que las asignaturas pendientes de la economía española son el elevado endeudamiento de los hogares –básicamente, a causa de los precios disparados de la vivienda–, la escasa productividad de las empresas españolas, el elevado nivel de inflación y el déficit de nuestro comercio exterior porque importamos más de lo que exportamos. Y como se hace con los malos alumnos, han acabado bajándonos la nota: nuestra economía crecerá un 3,1% en 2006 y un 2,8% en 2007, una y dos décimas por debajo, respectivamente, de los pronósticos iniciales.

España seguirá creciendo por encima de la media europea, a pesar de todo, pero esa diferencia será cada vez menor. Lo que frenará nuestro proceso de convergencia con los principales países de la UE por mucho que un estudio nos diga que en 2008 seremos como los alemanes. Entre ustedes y yo: no me lo creo. Y los responsables de nuestra economía harían bien en no creérselo tampoco porque está claro que tienen bastantes deberes pendientes si quieren mejorar sus notas en próximas convocatorias y, así, mejorar las perspectivas de nuestra economía, además de las de nuestros sufridos bolsillos.

Una economía que no ahorra, con unos precios que suben sin freno y sin empresas competitivas tarde o temprano lo pasará mal. Si a esos factores internos les añadimos otros externos, como la incertidumbre sobre la escalada del petróleo y la certeza de unos tipos de interés cada vez más elevados, parece claro que ya vamos un poco tarde.

¿Nuclear? ¿Sí, no, quizá?

20 minutos / 02.05.2006

La escalada del precio del petróleo, que, tras haberse casi duplicado en sólo dos años, parece estabilizado alrededor de los 72-73 dólares por barril, ha abierto un nuevo debate sobre la conveniencia de promover fuentes energéticas que reduzcan nuestra dependencia del crudo.En ese contexto hay quien defiende las excelencias de las energías renovables (eólica, solar, etc.), pero también ha propiciado el resurgimiento de los defensores de la energía nuclear («limpia» y «barata») como solución a nuestros males. No deja de ser curioso que esa defensa encendida coincida en el tiempo con el 20 aniversario de la tragedia de Chernóbil y con el cierre de la central de Zorita.

La decisión de abandonar la energía nuclear para generar electricidad, y el consiguiente cierre de las centrales nucleares, es una medida que Suecia ya adoptó en 1980. En los noventa le siguieron Italia y Bélgica, y en 2000, Alemania. Otros países, como España, han prohibido la construcción de nuevos reactores nucleares. Las razones que han llevado a tomar esas decisiones no han sido económicas, sino medioambientales, sociales o simplemente de oportunidad política.

Las ocho plantas nucleares españolas aportan una cuarta parte de la electricidad que se produce en nuestro país, donde las centrales térmicas superan el 50% de la generación eléctrica. En Francia, paradigma para muchos de los bajos costes –económicos, claro– energéticos, casi el 80% de los kilovatios tienen su origen en una central nuclear. La semana pasada, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se mostró a favor de un debate «en profundidad» sobre la energía nuclear que mire hacia un horizonte de «seguridad» y de «garantía energética». Lo difícil será conseguir que esos conceptos sean compatibles.

Bill Gates contra la UE

20 minutos / 25.04.2006

Es la lucha de David contra Goliat.Ayer se inició en Bruselas el juicio en el que Microsoft –cuyo sistema operativo (Windows) utilizan el 95% de los ordenadores del mundo– reclama que le quiten la supermulta de 497,2 millones de euros que le impuso la Comisión Europea en 2004 por abusar de su posición de dominio y atentar contra la competencia. Pero, contra lo que el sentido común pudiera sugerir, en este caso el papel de Goliat lo asume la compañía de Bill Gates, y de David lo representa la Unión Europea.

El poder de estos gigantes empresariales no sólo supera a los Estados, sino incluso a las organizaciones internacionales que los representan. Microsoft desplegará toda su artillería legal con un ejército capitaneado por medio centenar de abogados de los bufetes más prestigiosos del mundo. La UE se defenderá con media docena de voluntariosos funcionarios. Hay motivos para la esperanza: en los EE UU hizo lo mismo, pero acabó pagando la multa.

Los expertos sugieren que este juicio establecerá las reglas de juego del sector tecnológico en Europa, aunque seguramente sus repercusiones serán aplicables a otros mercados donde la tendencia a la concentración, a reducir el número de competidores, aumenta el peligro de posiciones dominantes y de tentaciones monopolísticas que las autoridades comunitarias deberán combatir para protegernos de posibles desmanes. Ésa es la tendencia natural de las economías capitalistas a este lado del mundo globalizado y sólo nos queda esperar a que las autoridades de la competencia hagan su trabajo y haya justicia. Si la UE aparece en una posición de inferioridad en casos como el que nos ocupa, ¿qué podremos hacer los simples ciudadanos de a pie para defendernos?

Lo del petróleo está crudo

20 minutos /18.04.2006

Nos fuimos de vacaciones de Semana Santa pagando la penitencia de otra subida de carburantes que ha convertido en un calvario el paso por las gasolineras estos días, cuando los hemos pagado un 14% más caros que un año atrás.Lo peor es que cuando las compañías petroleras trasladen a los surtidores los récords históricos que está marcando estos días el precio del petróleo habrá que rascarse aún más el bolsillo.

El nunca mejor llamado ‘oro negro’ superó el Jueves Santo la histórica barrera de los 70 dólares por barril. Y las gasolinas y gasóleos han estado estos días muy cerca de los máximos registrados en septiembre pasado, durante la crisis de los huracanes en los EE UU. Si el petróleo sigue disparado, esos precios serán una anécdota en unas semanas. Los expertos achacan este repunte del crudo a la crisis abierta por los planes nucleares de Irán, cuarto productor mundial de petróleo. Aunque la culpa de las tensiones alcistas se siguen atribuyendo a la elevada demanda de China, con una economía que crece a un ritmo tres o cuatro veces superior al nuestro, y a la falta de capacidad de los países productores para refinar la cantidad de carburantes que reclama el mercado internacional.

¿Se puede extrañar alguien de que ahorremos poco en una coyuntura como la actual? Si en 2005 las familias españoles sólo pudieron guardar en la hucha diez de cada cien euros de su renta disponible, y se endeudaron un 21% más que en 2004.¿Qué juegos malabares tendrán que hacer este año con las gasolinas por las nubes, los tipos de interés al alza y la vivienda todavía en niveles estratosféricos?

Otra vez a medias

20 minutos / 11.04.2006

La nueva reforma laboral que Gobierno, sindicatos y empresarios se traen entre manos –la quinta de nuestra democracia– será menos ambiciosa de lo previsto.Lo ha anunciado el ministro de Economía, Pedro Solbes, y después de ver como han acabado las barbas de nuestro vecino francés con su polémico contrato para jóvenes, parece incluso lógico que haya decidido poner las suyas en remojo.

La ambición con que se inició el proceso en marzo de 2005 ha dejado paso a un cierto conformismo: lo importante ahora es que haya acuerdo, por modesto que sea, para facilitar su aplicación.

Las exitosas jornadas de huelga y las manifestaciones millonarias en Francia han acabado por disuadir al Ejecutivo español de su intención de conseguir cambios de mayor calado. Y es de suponer que si no se aplican esas medidas anunciadas con la profundidad que sería deseable, será muy difícil conseguir los ambiciosos objetivos que se proponían, entre los cuales destacaba el de reducir la excesiva temporalidad de nuestro mercado de trabajo (30% frente al 12% de la UE). Como las cuatro reformas anteriores, se quedará corta.

El proceso de diálogo social ha vivido momentos críticos. El enfado de la patronal CEOE por la reciente Ley de Igualdad pactada entre el Ejecutivo y los sindicatos estuvo a punto de dar al traste con las negociaciones, y al parecer hay poca sintonía entre CC OO y UGT. Todas las partes se han comprometido a hacer los deberes esta Semana Santa para cerrar un acuerdo, por mínimo que sea, antes del verano. Habrá que ver cómo queda todo al final, y especialmente el nuevo y polémico contrato de fomento propuesto por el Gobierno y la CEOE, que preveía 33 días de indemnización por año trabajado en lugar de los 45 del indefinido actual.

La hipoteca de las hipotecas

20 minutos / 04.04.2006

El Gobierno está firmemente decidido a meter mano al mercado hipotecario para –dice– protegernos de las más que seguras subidas de tipos de interés a lo largo de este año.Por ello, ha anunciado diversas medidas para abaratar la apertura, el cambio o la cancelación de los préstamos hipotecarios; promover la hipoteca mixta (combina el tipo fijo y variable), y mejorar la información que reciben los clientes al contratar su préstamo hipotecario. Y todo ello será recogido por una ley en breve.

No cabe duda de que el anuncio llega en buen momento: se acaba de confirmar que el euríbor –el índice del que dependen el 98% de las hipotecas contratadas en enero y el 81% del total– acaba de superar el 3%, cuando los tipos de interés oficiales en Europa están aún en el 2,5%. Pero el Ejecutivo y el Parlamento deberán darse mucha prisa, porque las nuevas subidas están al caer: los expertos ven el precio oficial del dinero en el 3,5% antes del verano y sobre el 4% a final de año.

La premura del tiempo no será el único problema al que deberá hacer frente el Ministerio de Economía en su afán por atenuar los efectos negativos de esos aumentos de los tipos de interés sobre las finanzas de las familias hipotecadas. La banca tiene mucho que decir para que puedan llegar a ser realmente efectivas medidas como la de reducir la comisión por cancelación de hipoteca y el coste de constitución de los préstamos, o la de informar a los usuarios de los efectos de una subida de tipos sobre sus créditos. Sin la colaboración de bancos y cajas, será muy difícil ir más allá de las buenas intenciones gubernamentales. Y no olvidemos que en estos momentos buena parte de los espléndidos beneficios del sector financiero provienen de esas comisiones vinculadas a los muchos créditos hipotecarios que concede.

El mal francés

20 minutos / 28.03.2006

Francia se volverá a echar hoy a la calle contra el polémico contrato para menores de 26 de años –el llamado Contrato de Primer Empleo (CPE)– que contempla el despido injustificado de esos jóvenes durante los dos primeros años.Es un nuevo desafío de sindicatos, estudiantes y trabajadores al Gobierno presidido por Dominique de Villepin tras el anuncio, el 16 de enero pasado, de la puesta en marcha de esta nueva modalidad de contratación. Su objetivo es combatir el paro juvenil, que en Francia está en el 22% de la población activa, el más elevado de Europa después de Grecia (27%) e Italia (23%), y muy superior al de España (18,5%) o al de la media de la Unión Europea (16,7%).

Este controvertido contrato es sólo una parte de un amplio paquete gubernamental de medidas para luchar contra el paro en general. Francia también registra una de las tasas de desempleo más altas de Europa: el 9,6%, frente al 8,7% español o al 8% de media de la UE; y a mucha distancia del 4,9% del Reino Unido o el 5,8% de Suecia. Si la izquierda francesa inventó la jornada de 35 horas semanales, que ha tenido un resultado discreto; la derecha intenta lanzar un aparentemente ambicioso plan de fomento del empleo que no parece convencer a nadie.

El 67% de los franceses, o sea dos de cada tres, quieren que se retire el Contrato de Primer Empleo, que no sólo disgusta a sindicatos y estudiantes. Tampoco entusiasma a los empresarios y éstos se mueven entre la indiferencia y la oposición frontal al CPE porque esperaban una reforma laboral más ambiciosa. El nuevo contrato, dicen, se añade a la veintena de tipos de contrato diferentes que ya existen y que no han sido lo bastante útiles para sacar a la economía del letargo que sufre ni para luchar contra el paro excesivo que azota al país.

Derrochando energías

20 minutos / 21.03.2006

Las empresas españolas son cada vez menos competitivas en los mercados internacionales.Deben soportar una inflación más elevada que las compañías alemanas, italianas o francesas, y los niveles de productividad son todavía muy inferiores a los de sus competidoras. Y así es difícil poder ofrecer unos precios atractivos que les permitan colocar sus mercancías en el exterior. Pero además, dos informes revelan que son muy poco eficientes en el uso de la energía.

España gasta un 20% más de energía que la media de la UE para crear la misma riqueza, ya que consume 226 kilogramos equivalentes de petróleo por cada 1.000 euros de Producto Interior Bruto (PIB) que genera, cuando en el conjunto de los Quince gasta sólo 190. Sólo Finlandia, Portugal y Grecia tienen unos registros peores que los nuestros (ver tabla adjunta), según las cifras de la oficina estadística de la UE.

El caso de la industria manufacturera es especialmente grave: nuestras empresas destinan un 50% más de recursos energéticos que la media europea para fabricar lo mismo. Lo dice un estudio de Caixa de Catalunya que se conoció ayer. Y el dato, lejos de mejorar, empeora, ya que hace 25 años era ‘sólo’ un 24% más. O sea, que cada vez son más ineficientes, lo que las coloca cada vez más lejos de su competencia europea. Visto lo visto, ¿no va siendo hora ya de actuar con contundencia y dejarse de OPA y zarandajas para concentrarse en lo que realmente importa?

Las que más ganan

20 minutos/ 07.03.2006

A estas alturas del año ya conocemos los resultados de las principales compañías españolas que cotizan en Bolsa, las que forman parte del índice Íbex-35.Lo cierto es que no suponen ninguna sorpresa en cuanto a las que salen mejor colocadas. Los grandes bancos se llevaron casi un tercio (31,5%) de los 36.695 millones de euros de beneficios que las treinta y cuatro grandes consiguieron en 2005 (Inditex los hará públicos a finales de marzo); las energéticas, más de una cuarta parte (26%); y Telefónica en solitario, el 12%. Es decir, banca, energía y telefonía representan el 70% de esas ganancias. A continuación se sitúan las constructoras, con un 7% de los beneficios.

No deja de ser curioso que sean, precisamente, estos sectores los que registran las cifras más positivas, aquellos que acumulan un mayor número de quejas y denuncias por parte de los consumidores. Uno se pregunta si algún día se plantearán la conveniencia de moderar esos márgenes astronómicos para destinar una parte de los ingresos a contentar a sus clientes: si no puede ser con unos precios más ajustados, sí al menos con un servicio más eficiente.

Especialmente tras cerrar el tercer año consecutivo con récord de beneficios, con un incremento medio del 45,7%, y donde por primera vez en la historia una empresa española, el Banco Santander, ha ganado más de un billón (con b) de pesetas, con 6.220 millones de euros de beneficio. Mientras, los que dependemos de la nómina –y que dure– contemplamos, resignados, cómo nuestro sueldo sube menos que los precios, cómo la inflación se come nuestros (escasos) ahorros y cómo la vivienda o la gasolina se convierten casi en bienes de lujo.

Sopa de OPAs

20 minutos / 28.02.2006

Por extraño que pueda parecer, a juzgar por el énfasis con que unos y otros toman posición a favor o en contra, la lucha entre Gas Natural y la alemana E.ON por quedarse con Endesa es tan sólo uno más –y no el más relevante– de los movimientos empresariales que se dan actualmente en el escenario económico internacional.En Francia, quizá recordando aquello de las barbas del vecino y las tuyas en remojo, se ha lanzado una operación promovida por el Gobierno galo y liderada por el grupo energético Gaz de France para evitar que la compañía franco-belga Suez caiga en manos de la eléctrica italiana Enel. O sea, es como si una empresa extranjera –pongamos que alemana– intentara quedarse con una eléctrica española y otra de aquí, –Gas Natural, por ejemplo– intentara comprarla para defender su españolidad. ¿Se imaginan? Por el momento, el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ya se ha quejado amargamente de la maniobra francesa. ¿Y que hay del triste papel que jugaron sus ministros y el presidente del Banco de Italia para frustrar el intento de asalto del BBVA a laBNL?

Mientras tanto, la compañía anglo-india Mittal, el gigante mundial del acero sigue concretando su oferta para hacerse con el número dos del sector, Arcelor, una compañía con fuerte implantación en diversos países, entre ellos España. El rechazo de los gobiernos afectados a la OPA de Mittal ha sido unánime, apelando a la defensa «nacional» de un sector estratégico. ¿Les suena? Por ello, y más allá de la discusión sobre qué margen de maniobra tienen los Estados para intervenir en estas grandes partidas de la economía mundial, resulta menos sorprendente la reacción del Gobierno español ante la contraopa de E.ON por Endesa.

¿Pueden bajar más los salarios?

20 minutos / 21.02.2006

Los números cantan.Los últimos datos conocidos sobre la marcha de los salarios en España y su previsible evolución confirman las cifras oficiales que periódicamente nos proporciona el Instituto Nacional de Estadística (INE). Los que dependemos de una nómina hemos perdido cinco puntos de poder adquisitivo desde 2000: nuestra paga ha crecido una media del 17% y la inflación, medida por el Índice de Precios de Consumo (IPC), lo ha hecho casi un 22%.

Pero ese diferencial ya preocupante adquiere una especial relevancia en el caso de los alimentos, que han subido en un 27,2% en los últimos cinco años; la vivienda, (+26,3%) y el transporte (+24%). La enseñanza y el capítulo de bares y restaurantes son las partidas más inflacionistas y acumulan subidas superiores al 29% en el IPC. Sólo el apartado de comunicaciones ha experimentado un descenso del 11% en ese periodo gracias a la feroz competencia desatada entre las telefónicas.

¿Ha ayudado esa moderación salarial a controlar los precios?, como defiende una parte de la teoría económica. La realidad es tozuda. Lo demuestra el informe de una comisión de expertos para el Ministerio de Trabajo, según el cual la remuneración real por asalariado en España se ha estancado en la última década, mientras que en la Unión Europea (UE) ha crecido de forma moderada. Pero los precios andan disparados aquí y los de nuestros vecinos están bastante controlados.

La culpa es de los contratos temporales, dicen esos mismos expertos, porque cuando hay muchos trabajadores con contrato temporal, se rebaja el poder de los asalariados para negociar subidas de sueldo con las empresas. Tenemos casi el triple que la UE. Y así nos va.

Impuesto sobre el humo

20 minutos / 14.02.2006
Los impuestos que se aplican a la venta del tabaco en España han vuelto a subir por tercera vez en seis meses.El Gobierno quiere combatir así la proliferación de marcas baratas y desactivar la guerra de precios bajos declarada entre las principales tabacaleras. Son éstas las dos armas que la industria esgrime con la intención de frenar la más que previsible pérdida de beneficios por la polémica ley antitabaco. Las ventas ya cayeron un moderado 0,6% en 2005 y se espera que este año sea bastante peor.

El mercado del tabaco está experimentando un curioso fenómeno que aparentemente contradice las leyes económicas: tras dos alzas casi consecutivas de impuestos, los precios han bajado a niveles históricos. Ya hay quien pide que se aplique la misma terapia a la vivienda o a los carburantes. Pero va a ser que no. Las empresas tabacaleras no repercuten en el precio final de esas subidas porque andan más empeñadas en contrarrestar los perniciosos efectos (para ellas, claro) de una normativa que busca reducir la cifra de fumadores, cosa que por ahora no pasa con los pisos o las gasolinas.

Lo cierto es que esas compañías no se pueden quejar porque en una década las ventas de cigarrillos en España –y sus ganancias– no han parado de crecer. Han pasado de 3.600 millones de cajetillas en 1996 a 4.600 millones en 2005. Y al Gobierno tampoco le ha ido mal: en 2000 recaudó 4.369 millones de euros en impuestos del tabaco y el año pasado, 5.600 millones, prácticamente la mitad de lo que ingresó por el impuesto sobre carburantes. Ahora lo tendrá un poco peor. Si se cumplen las previsiones y baja el consumo de cigarrillos, podría perder cerca de 2.000 millones, aunque tras el último aumento de impuestos puede que sean algo menos.

Wednesday, February 08, 2006

La OPA, a todo gas

Cuesta creer que la compra de Endesa por
Gas Natural pueda ser buena para la competencia.

20 minutos/07.02.2006
Las cuestiones económicas se suelen clasificar, a grandes trazos, en dos grupos: las que tienen relación con la marcha de los países y las grandes empresas (macroeconomía) y las que afectan directamente a nuestro bolsillo (microeconomía).Evidentemente, un mismo hecho económico puede tener implicaciones en ambos niveles e incluso puede ser bueno para uno y malo para otro. Algo de eso hay en la OPA, la oferta de compra, que Gas Natural ha lanzado sobre Endesa, la primera eléctrica española.

La suma de las dos compañías dará como resultado un potente grupo energético español con capacidad para resistir posibles tentativas de control por parte de empresas extranjeras, en un sector estratégico para nuestra economía, y para proseguir la expansión iniciada ya por ambas en Europa y sobretodo en Latinoamérica, donde tienen ya casi tantos clientes como aquí. Es decir, que en el plano macroeconómico se puede considerar una operación favorable.

Para los clientes, la cosa está menos clara, pese a que las condiciones impuestas por el Gobierno a Gas Natural y aceptadas por la empresa gasista intentan salvaguardar la competencia en un sector donde ésta brilla por su ausencia. Tres años después de la supuesta liberalización, muy pocas familias han cambiado de suministrador, básicamente por el lío burocrático que supone y el mínimo ahorro que pueden obtener (de 20 a 40 euros anuales, según diversos estudios). Desde el punto de vista microeconómico, cuesta creer que de la unión entre la eléctrica que controla el 60% del mercado español –casi el 100% en las autonomías donde está implantada– y la firma que tiene cerca del 80% de los clientes de gas del país pueda nacer una empresa que ayude a reducir los precios y a mejorar la calidad del servicio.

Banca de peaje

Las comisiones pesan cada vez más en el negocio
bancario por lo que habrá más y seguirán subiendo.

20 minutos.es/31.01.2006
Cada vez pagamos más comisiones al banco o a la caja de ahorros.Se encarecen año tras año y nos cobran por servicios que antes eran gratuitos. No es raro que las quejas de los clientes por el uso (y abuso) que se hace de las comisiones hayan crecido espectacularmente, como certifica el Banco de España. De hecho, han aumentado casi tanto como el peso de los ingresos que el sector financiero obtiene gracias a ellas: hace veinte años representaban sólo 12 de cada 100 euros que ganaban bancos y cajas, ahora ya son 30.

El cobro de este ‘peaje’ por los conceptos más diversos ha permitido a las entidades financieras casi triplicar sus ingresos por comisiones en diez años –de los 3.735 millones de euros de 1995 se pasó a 9.560 millones en 2004– en un contexto de tipos de interés bajos, sin margen para obtener beneficios por esa vía. Las comisiones netas, la diferencia entre las comisiones que cobran y las que pagan a los clientes, han crecido alrededor del 10% anual, que es lo mismo que han aumentado de media los beneficios de la banca.

La supuesta ‘guerra de las comisiones’ que debería haber desatado la decisión del Santander Central Hispano de suprimir el cobro de comisiones a más de dos millones de clientes no será tal. Por ahora, sólo algunas entidades de tamaño medio como la CAM, Bancaja, Cajamar o Caixa Galicia han decidido ganar (o conservar clientes) siguiendo los pasos del primer banco español. Los otros grandes del sector no harán nada porque, dicen, sus comisiones son más razonables que las del SCH. Van a mantener su política del «quién algo quiere algo le cuesta» y seguirán cobrando por los servicios que prestan. La guerra, pues, se queda en la pequeña batalla que cada uno de nosotros tendrá que librar negociando esas comisiones con el director de nuestra oficina.

¿Un buen negocio?

El nuevo sistema de financiación del Estatuto
queda muy lejos de las aspiraciones catalanas.

20 minutos/24.01.2006
Vistos los detalles del nuevo Estatuto en el terreno económico cabe preguntarse dos cosas: ¿ha conseguido Cataluña lo que buscaba? ¿Se rompe la solidaridad entre territorios?La respuesta a la primera es que no. Los negociadores catalanes aspiraban a recaudar todos los impuestos que se pagan en Cataluña y se han contentado con aumentar la participación en una serie de impuestos (IRPF, IVA, alcohol, tabaco, carburantes) de los que ya recibían parte de sus ingresos. Poca novedad: las anteriores reformas impulsadas por CiU –en 1993 con el PSOE, y en 1996 y 2001 con el PP– eran muy parecidas a ésta y sus resultados han sido más bien discretos.

El compromiso del Gobierno de compensar la deuda histórica (se habla de entre 2.600 y 3.000 millones de euros) por la poca inversión estatal en Cataluña en los últimos años parece el mayor logro: el gasto público estatal deberá ser proporcional al peso de la población catalana en el conjunto del Estado. Lo sorprendente es que no lo haya sido hasta ahora. Esa actitud de los gobiernos centrales, fuera quien fuera el partido en el poder, ha generado un serio déficit fiscal (diferencia entre lo que se paga en impuestos y lo que se recibe del Estado). Por último, han conseguido sólo a medias su objetivo de tener un agencia tributaria propia.

El futuro de la solidaridad entre autonomías es el gran argumento de los que se oponen al acuerdo. La clave para que la haya está en hacerla compatible con el crecimiento económico de las más desarrolladas. Y eso vale para Cataluña, pero también para Baleares, la Comunidad Valencia y Madrid.

Monday, January 16, 2006

Asignaturas pendientes

20 minutos/17.01.2006
En el arranque del año, expertos y analistas han lanzado toques de atención al Gobierno, sindicatos y empresarios para que hagan frente a las asignaturas pendientes de la economía española de una vez por todas. Alertan de que éstas pueden hacer que suspendamos todo el curso pese a que se están consiguiendo buenas notas en otras materias.

Es decir, sacamos un excelente en crecimiento económico (muy por encima de la media europea) y en empleo (con cifras históricamente bajas de paro), un notable en saneamiento de las administraciones públicas (que cerrarán con superávit en 2005), y un suficiente pelado en el consumo, que se modera; y en los precios de la vivienda, que seguirán creciendo pero no tanto.
Se trata de buenos datos coyunturales (es decir, hoy son así y otro día pueden ser asá), que peligran si no conseguimos corregir los desequilibrios estructurales, los que dependen de una evolución a más largo plazo. Ayer mismo volvieron sobre el asunto el propio Ministerio de Economía, el Banco de España y el comisario europeo de Asuntos Económicos.

Suspendemos en inflación  porque los precios crecen aquí mucho más que los de nuestros socios europeos. Lo que hace más pobres a las familias y resta competitividad a nuestras empresas. Además, tenemos un muy deficiente en innovación y tecnología, donde estamos a la cola de Europa. Dos lastres que sumados nos proporcionan otro suspenso rotundo en la balanza comercial: el descenso de las exportaciones y el alza de las importaciones han aumentado un 62% el déficit de la balanza de pagos (que recoge los ingresos recibidos del exterior y el gasto hecho en el resto del mundo). La coincidencia en el diagnóstico es casi total, pero no en qué clases de repaso ponemos en marcha para ver si conseguimos aprobar.Y ahí es donde hace falta que nos pongamos de acuerdo ya.

¿Qué IRPF tendremos?

20 minutos/10.01.2006
Se espera que hoy Zapatero desvele detalles de la anunciada reforma del impuesto de la rentaComo en las mejores películas de Hitchcock, el Gobierno parece resuelto a seguir desvelando los vericuetos del nuevo impuesto de la renta poquito a poco. Se nos anuncia que hoy el mismísimo José Luis Rodríguez Zapatero aprovechará su intervención en un foro económico para detallar algunos de los cambios que encontraremos al hacer nuestra declaración del IRPF en 2008, un año en que casualmente (o no) tocan elecciones generales. Al parecer forma parte de la ofensiva gubernamental para diluir el peso de la polémica sobre el Estatut catalán en el nuevo curso político.

Pero no está la reforma fiscal como para sacar pecho, especialmente si recordamos que se decidió retrasarla para aplacar las hostilidades que su elaboración desató entre diferentes ministerios.

El impuesto de la renta es una de las tres patas sobre las que se sustenta el 80% de los ingresos tributarios del Estado. Tres de cada diez euros que recauda proceden del IRPF, otros tres del IVA y dos del Impuesto de Sociedades. Por tanto, cualquier cambio puede afectar sustancialmente a las cuentas públicas. Y además es uno de los puntales del sistema de financiación autonómica.

Quizá hoy podamos comprobar si se respetan o no los principales ejes de esa reforma anunciados en su día a bombo y platillo: disminuir la carga fiscal sobre las rentas de los trabajadores, reducir los tramos y el tipo máximo (ahora en el 45%) y revisar las deducciones para que sea un impuesto más justo. Lo que sí podemos exigir desde ya a nuestros políticos es que hagan el favor de ponerse de acuerdo en cuestiones básicas y, si no es mucho pedir, que ese nuevo IRPF tenga algún futuro más allá de la próxima mudanza en La Moncloa. Que ya está bien de tanto cambio.

Monday, January 09, 2006

2006, el año del frenazo

20 minutos/03.01.2006
Cada vez son más los síntomas que demuestran un parón del consumo, que andaba disparado.El año que acabamos de dejar en la cuneta ha ido sobre ruedas. Sobre las ruedas de los campeones del motor que tantas alegrías nos dieron, con Alonso y Pedrosa a la cabeza, y sobre las del millón y medio largo de coches –1.528.849, concretamente– que se vendieron en 2005. Se trata del segundo récord anual de matriculaciones de turismos tras los 1.517.286 de 2004. Pero no parece que este flamante 2006 pinte demasiado bien para el sector. Los males de la industria, con los fabricantes de vehículos y componentes ajustando plantillas en los cinco continentes, se dejarán notar también en las ventas. Los propios empresarios son conscientes de ello y se conformarían, dicen, con que la caída fuera de entre el 2% y el 3%. Pese a los récords, los últimos tres meses ya han detectado que las ventas han empezado a dar marcha atrás. Lo mismo sucede en los principales países europeos, y no se espera que esa tendencia cambie.

La pérdida de gas del mercado automovilístico no será un hecho aislado en el nuevo año. Los precios de la vivienda, una de las principales partidas del gasto familiar, seguirán subiendo, pero más lentamente.

Aunque a los niveles en que están continuarán siendo igual de prohibitivos. Y qué decir del petróleo: tras los máximos históricos de 2005, seguirá disparado en 2006. Con tanto coche vendido, la demanda de carburantes está más que asegurada. Estos y otros pronósticos permiten augurar un frenazo del consumo en los próximos meses. Los tipos de interés, que seguirán subiendo, serán los principales culpables.

Con el dinero más caro, se acabará la alegría que nos ha llevado a batir los récords de endeudamiento que tan seriamente amenazan la salud de nuestra economía. Ahora veremos si esa buena marcha que nos llevaba a crecer más que nuestros vecinos era real o era fruto de esa euforia desmedida. O sea, que no hay mal que por bien no venga.

Wednesday, December 28, 2005

Que alguien nos proteja

20 minutos/27.12.2005
Las estafas y los engaños acechan mientras los consumidores nos preguntamos quién para esto. He recibido una carta que me anuncia que he conseguido un premio de 200 euros. Sólo tengo que llamar a un número que empieza por 902 (o sea, de los que te crujen) y reclamarlo. Evidentemente, no voy a llamar y les recomiendo a todos los que reciban semejante misiva que no lo hagan. Les tendrán un buen rato al teléfono con cualquier excusa mientras los muy pillos les sacan los cuartos. Y hay que extremar las precauciones porque los timadores son cada día más sofisticados. En este caso, el diseño de la carta reproduce el del recibo de una empresa petrolera imitando sus colores corporativos.

Los mismo sucede con las estafas bancarias. Aquellos mensajes que nos invitaban a enviar nuestros datos bancarios, con unas traducciones malísimas que alertaban de los espurios fines que buscaban, son hoy ya mensajes gramaticalmente impecables. De hecho, una asociación de internautas ha detectado casi 300 denuncias de esta prácticaa lo largo de 2005, conocida como phising, y ya no sólo se dirigen a clientes de banca por Internet, sino que utilizan falsas webs de recargas para móviles, empresas de subastas, envío de dinero,...

Y por si no fuera sufiente con los timos, otros intentan engañarnos con algunas ofertas publicitadas que no se corresponden con la realidad, especialmente en los sectores tecnológicos y financieros. Por ello, como consumidores, lo mejor que podemos hacer es estar atentos, no creer en euros a noventa céntimos y sobre todo confiar en quien debe hacer algo–las autoridades competentes y las entidades afectadas– para protegernos de tanto timo, tanta estafa y tanto engaño.

Facturas que subirán

20 minutos/20.12.2005
El Gobierno estudia cuánto nos van a aumenar el recibo de la luz, el gas y el teléfono en 2006.La Comisión Nacional de la Energía, el organismo que regula el mercado energético en España, se reunió ayer para autorizar a las compañías eléctricas y de gas natural a subirnos la factura cerca de un 5% a partir de enero, o sea, casi el doble de la inflación. Es la propuesta que ha hecho el Ministerio de Industria, encargado de fijar los precios para evitar que las empresas se aprovechen de un sector donde casi no existe competencia, es decir, donde el cliente lo tiene dificil para poder escoger. No obstante, el Gobierno ha decidido romper este año la tendencia de los últimos nueve años de alzas contenidas que se traducían en rebajas reales teniendo en cuenta que siempre eran inferiores a los aumentos del IPC.

¿Por qué estas subidas, ahora? Los más mal pensados creen que tiene algo que ver con la OPA de Gas Natural para quedarse con Endesa, la primera eléctrica española. Cediendo así a las presiones de las compañías, dicen, habrá menos oposición a un proceso que cuenta con la bendición del Ejecutivo. Además, éste se ha comprometido a compensarlas por la diferencia entre las subidas aplicadas en estos años de tarifas reguladas y los costes que aquellas no han podido repercutir en la factura. Un regalo de Reyes que acabaremos pagando entre todos.

Mientras, seguimos esperando que esos aumentos en el recibo se traduzcan en un mejor servicio, en menos cortes de suministro por las razones más peregrinas y, en definitiva, en la llegada de la competencia a un sector que se resiste a jugar con las reglas del libre mercado. Y no se queda ahí la cosa, porque después viene Telefónica. Ya se anuncia que la subida media será baja, aunque siempre nos podrá aumentar la cuota de abono como hizo este año.

Friday, December 16, 2005

Comercio y/o desarrollo

20 minutos/13.12.05
La Organización Mundial del Comercio se reúne desde hoy con el reto de ayudar a los países pobres.Hay cuestiones que parece que no van con nosotros hasta el día en que nos damos cuenta de que nos afectan. La pasada semana se celebraba en Montreal una cumbre sobre el cambio climático, algo que hasta hace poco veíamos como algo lejano, porque, pensábamos, sólo era cosa de cuatro ecologistas exaltados. Pero a golpe de huracán, de terromoto, de tsunami, de sequía y de olas de frío polar o de calor tropical hemos acabado entendiendo que debemos preocuparnos por ello y mucho.

Algo parecido sucede con la reunión sobre el comercio mundial que desde hoy tiene lugar en Hong Kong.

Un centenar largo de países discutirán cómo seguir eliminando barreras comerciales –o sea, las trabas que ponen a la entrada de productos de otros países en su territorio– con el encomiable objetivo de favorecer a la economía global, en general, y el desarrollo de los países pobres, en particular. Convocados por la Organización Mundial del Comercio (OMC) deberán decir hasta dónde están dispuestos a llegar en ese «desarme» de medidas proteccionistas que limitan la pretendida libre circulación de mercancías.

Por lo visto, la cosa no pinta muy bien porque hay tantas diferencias entre los países ricos y pobres, y entre los propios ricos, que llegar a algún tipo de acuerdo para dar pasos en la dirección deseada parece una quimera. Y los movimientos antiglobalización ya han dejado sentir sus críticas. Por si acaso, la OMC les dedica un apartado en su web (www.wto.org) donde rebate los «malentendidos» (diez, concretamente) que hay sobre su papel. Claro que también dedica otro a las ventajas (también diez, curiosamente) que reporta su existencia al bien común de la humanidad.